Epílogo
Adam estaba en
su oficina, mirando hacia la fogata de la chimenea, observando cómo las llamas
se movían de un lado a otro, pensando en los cientos de problemas que tenía
desde que Dana había bajado desde cielo para caer, para ser un ángel caído como
él, solo por amor. No podía evitar recordar su historia cuando veía la lucha
que ella mantenía contra Gabriel, quien también cayó una vez, pero por Dana.
—Que tragedia
–susurró Adam, lamentando que Gabriel y Dana nunca se pudieran reencontrar y
ser felices como en el pasado. Aquello era una alternativa imposible para ellos,
más ahora que Dana se había enamorado de Ethan. Era todo un triángulo amoroso
que estaba dirigido hacia una persona: Dana.